Comunidad Mujer, Julio Olalla y la gratuidad
El lunes se dió término a la versión 2006 del programa de Mentores de Comunidad Mujer. He tenido durante dos años la suerte de haber sido invitado a participar en este proyecto de mentoría a mujeres profesionales o empresarias que están en un momento de cambio de su vida laboral o empresarial.
Esta iniciativa que lideran Margarita María Errázuriz, Esperanza Cueto y María Luisa Silva, ha tenido excelentes resultados, no siempre se logran todos los objetivos, pero creo que bastan unos cuantos ejemplos exitosos para que al igual que el caso de la bola de nieve, el apoyo y las redes que se van creando tengan un efecto multiplicador y esperanzador.
Sí, esperanzador, porque como dicen muchos de los teóricos de la administración estamos necesitados de las carácteríaticas femeninas en las prácticas administrativas para lograr mejores resultados y humanizar el trabajo. Les recomiendo leer los últimos artículos de Tom Peters en que centra en la mujer el futuro de la administración, como líderes, como clientes, como concepto de cooperación en vez de competencia.
En este punto Julio Olalla, presidente de Newfield, uno de los más destacados intelectuales del coaching a nivel mundial (otro de nuestros chinos Rios, pero en un ámbito distinto) dió una charla sobre la gratuidad e invitó a una conversación sobre el tema.
Mostró como en lo femenino -no en las mujeres precisamente sino en el carácter femenino, signos que pueden estar presentes tanto en los hombres como en las mujeres-se encuentra la gratuidad, clave en las relaciones sanas, tanto en la empresa como en la familia o en la sociedad. Mencionó que veía como la gran falla de la educación la falta de entrenamiento en éste valor. La gratuidad abre espacios, oportunidades, soluciona, pacifica, toma conciencia del medio ambiente...
Quiero agradecer a Comunidad mujer, a Julio, a Margarita, a Esperanza y María Luisa por un espacio enriquecedor.
Esta iniciativa que lideran Margarita María Errázuriz, Esperanza Cueto y María Luisa Silva, ha tenido excelentes resultados, no siempre se logran todos los objetivos, pero creo que bastan unos cuantos ejemplos exitosos para que al igual que el caso de la bola de nieve, el apoyo y las redes que se van creando tengan un efecto multiplicador y esperanzador.
Sí, esperanzador, porque como dicen muchos de los teóricos de la administración estamos necesitados de las carácteríaticas femeninas en las prácticas administrativas para lograr mejores resultados y humanizar el trabajo. Les recomiendo leer los últimos artículos de Tom Peters en que centra en la mujer el futuro de la administración, como líderes, como clientes, como concepto de cooperación en vez de competencia.
En este punto Julio Olalla, presidente de Newfield, uno de los más destacados intelectuales del coaching a nivel mundial (otro de nuestros chinos Rios, pero en un ámbito distinto) dió una charla sobre la gratuidad e invitó a una conversación sobre el tema.
Mostró como en lo femenino -no en las mujeres precisamente sino en el carácter femenino, signos que pueden estar presentes tanto en los hombres como en las mujeres-se encuentra la gratuidad, clave en las relaciones sanas, tanto en la empresa como en la familia o en la sociedad. Mencionó que veía como la gran falla de la educación la falta de entrenamiento en éste valor. La gratuidad abre espacios, oportunidades, soluciona, pacifica, toma conciencia del medio ambiente...
Quiero agradecer a Comunidad mujer, a Julio, a Margarita, a Esperanza y María Luisa por un espacio enriquecedor.
posted by Andres Alemany E at 11:32 a. m.
4 Comments:
la gratuidad: ¿dar sin esperar algo a cambio? ¿ofrenda?
saludos,
Iris
Iris,
sí gratuidad fué definida como entregar sin esperar algo a cambio. No sabría sí ofrenda es lo mismo.
Creo que lo importante es entender que no todo lo podemos medir por cuanto ganamos en términos materiales. Que lo que se entrega con sentido de gratuidad, tiene una recompensa en lo no esperado.
Parte de esta gratuidad debiera ser con nuestro medio ambiente, ¿cómo sería entregarle algo a nuestro terruño -aire, naturaleza, entorno- sin esperar nada de ello?
Dear Sailor, la energía de dar es algo que no se puede explicar sino se experiencia, pero si miras bien, ha sido la enseñanza fundamental de todos los avatares fundadores -a su pesar- de religiones.
Dar, entregar, pensar, poner tu ser en algo fuera de ti mismo por unos momentos es magia pura, la receta contra todos los males, y la mas directa via hacia la iluminación.
Es verdad que no esperas nada a cambio, pero si alguna vez has recorrido ese sendero, te darás cuenta fácilmente que una vez que lo pisas el sabor de ser útil al proceso de la humanidad es tan sabroso y potente que no existe aquello de esperar algo a cambio...
La verdadera experiencia del Boddicitta budista, la clave del trabajo interior, es compasión. pero no la compasión mas entendida o mal enseñada en colegios católicos. Estoy hablando de ser capaz de entrar en los corazones de los seres y desde ahí respirar. La veradera compasión de Jesús es exactamente eso. Su único mandamiento también habla de eso. Del otro..
Como piensas, el mundo sería diferente si mas de nosotros fuéramos capaces de estar por algunos momentos al día fuera de nosotros, en Boddicitta, en compasión verdadera hacia todos los seres sintientes.
Buenos vientos para ti
así como la naturaleza nos regala sus maravillas
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